Introducción
Al final del siglo XVIII dos jóvenes naturalistas europeos, Alexandre Von Humboldt y Aime Bonpland se aventuran a través del corazón de la selva a la búsqueda del mítico río Casiquiare. “AIRE LIBRE” propone evocar ese “BUEN MOMENTO”, dónde dos jóvenes magníficamente abiertos a la vida, llenos de una hirviente felicidad y de una insaciable sed de conocimientos, son tan “infelices” que tardarán sesenta años en NO OLVIDAR su aventura…
Ficha técnica
Aire libre / Passage des hommes libres / Out in the Open
Luís Armando Roche / 1996 / 1h36 / Venezuela, Canadá, Francia
Guión: Jacques Espagne, Luis Armando Roche
Género: Histórico, aventuras
Música: Federico Ruiz
Fotografía: Vitelbo Vasquez
Montaje: Esperance Ruiz
Intérpretes: Carlos Cruz (Pedro Montanar), Armando Gota, Sacha Hidalgo, Roy Dupuis (Aimé Bonpland), Dora Mazzone (Ana Villahermosa), Dimas González, Victoria Robert, Christian Vadim (Baron von Humboldt), Wolfgang Preiss, Orlando Urdaneta
Producción: Marie Françoise Roche (PRODUCCIONES 800 C.A. – Suzanne Girard (BLEU, BLANC, ROUGE, Inc. Montreal – Morelba Pacheco MORELBA PRODUCTIONS, Paris) para Producciones 800 C.A. y el Centro Nacional Autónomo de Cinematografía.
Distribución: Marie Françoise Roche, Alianza Francesa
Sinopsis
Alexandre Von Humboldt dedica sus últimas fuerzas a escribir el resultado de sus descubrimientos cuando le informan de la muerte de Aimé Bonpland. Los dos naturalistas no se ven desde hace más de cincuenta años, cuando el médico francés regresó a la América Tropical para completar sus colecciones, pero sobre todo para estudiar a los indios, los métis y los pemones, entre los que acaba de morir. A la luz de algunos de los hechos más notables de su viaje a Venezuela con Bonpland, Humboldt revive sus momentos de vida en común: su juventud, su entusiasmo, su deseo de nuevos conocimientos científicos y humanos, y sobre todo la increíble búsqueda del río Casiquiare que conectaría el Orinoco y el Amazonas…
Notas del Director
Alexander Von Humboldt es prusiano, noble y rico, Aimé Bonpland es francés y de orígenes modestos. Cuando se encuentran en París, Humboldt tiene 29 años, Bonpland 25. El primero viene de rechazar el puesto de Director General de las Minas de Silesia y busca desesperadamente una ocasión de recorrer el mundo para ejercer su pasión por la geografía, la geología, las ciencias humanas y la botánica. Médico diplomado de la Marina, el segundo divide su tiempo entre las plantas, su pasión, y el Museo de Historia Natural dónde sigue la enseñanza del gran maestro biólogo Jusssieu mientras espera una hipotética participación a una campaña científica: o la de Bonaparte a Egipto, o la que Nicolas Baudin quien espera realizar un viaje alrededor del mundo. Alexander es homosexual, Bonpland amante incorregible de las mujeres….
Extraño y complejo laberinto de parecidos y diferencias. Sin embargo tienen en común tres rasgos esenciales de carácter que van a servir de catalizadores de una amistad indestructible de increíble riqueza. Tanto el uno como el otro están animados por ideales democráticos de total generosidad. Ambos son ávidos de conocimiento y de voluntad de hacer don a la humanidad del aporte de sus descubrimientos. Y al fin, ambos son jóvenes, dispuestos a ser maravillados y audaces hasta la inconsciencia.
Por cuatro años, van a surcar incansablemente la América Española y utilizar todos los recursos de sus espíritus enciclopédicos para hacer una descripción metódica de lo que observan que nadie antes que ellos había llevado tan a fondo. Viajan más de quince mil kilómetros cargados de instrumentos científicos, levantando mapas, anotando observaciones sobre la naturaleza y los hombres, los hechos históricos y geográficos, estableciendo así los primeros perímetros sobre la formación geológica del continente y esquizando el primer esbozo demográfico…
Son ellos, entre otras cosas, los fundadores de la antropología, y de la etnología americana por su descripción objetiva de los indios y pioneros de la arqueología del continente. Esbozan igualmente una visión de la sociedad colonial española, con sus luchas de intereses, sus métodos de explotación. Su trabajo anuncia lo que va ser la América Latina del siglo XIX después de la victoria de los libertadores, con sus desequilibrios y sus guerras civiles….
Por Luís Armando Roche